Concurso ITE Sandbox: Resiliencia frente al cambio climático
Nuestro equipo ganó la Categoría Profesional del Concurso Sandbox del Instituto de Ingenieros de Transporte 2024: Resiliencia frente al cambio climático.
El objetivo de la competencia era aplicar “una variedad de actividades estratégicas, programáticas y tácticas para mejorar la resiliencia de la infraestructura de transporte en respuesta a cuatro posibles amenazas climáticas/naturales: inundaciones costeras, incendios forestales, tormentas invernales y calor extremo”. Los participantes tuvieron el desafío de crear un plan integral que incluyera estrategias de mitigación y adaptación, junto con una mejora del diseño de infraestructura conceptual, para abordar los riesgos relacionados con el clima para dos de cuatro eventos.
Nuestro equipo decidió abordar los riesgos de incendios forestales en Idaho Falls, Idaho, y los riesgos de calor extremo en Billings, Montana. El enfoque implicó evaluar los sistemas de transporte existentes en cada ubicación y sus vulnerabilidades en situaciones de emergencia. Utilizando este análisis, desarrollamos un plan para mejorar la resiliencia antes, durante y después de tales eventos. Para complementar el plan, rediseñamos un corredor vital en cada ubicación para apoyar mejor a las comunidades durante las emergencias.
Para Idaho Falls, nuestro plan se centra en medidas proactivas para defender los espacios públicos, fomentar la conciencia y la educación públicas y mejorar las capacidades de respuesta a emergencias. Las estrategias clave incluyen la adopción de un marco comunitario adaptado a los incendios, la mejora de las conexiones de las carreteras locales con la I-15 y la US-20, la implementación de un sistema de carriles de contraflujo para las evacuaciones y la socialización de los residentes en este sistema mediante orientación y simulaciones.
Para Billings, nuestro plan describe iniciativas de resiliencia para mitigar los impactos del calor extremo en personas y comunidades vulnerables, garantizando desplazamientos seguros y bienestar general. Las estrategias clave incluyen brindar acceso a centros de enfriamiento, organizar programas de extensión, establecer un sistema de alerta temprana de calor extremo, diseñar infraestructura resistente al calor y ofrecer asistencia de emergencia.
Esta participación en el concurso demostró la importancia de una planificación integral y mejoras de infraestructura que mitiguen los peligros y se adapten al clima cambiante. La naturaleza impredecible de los impactos del cambio climático exige soluciones flexibles que puedan modificarse para satisfacer las necesidades únicas de diversas comunidades. Esto garantiza que las medidas de resiliencia sean efectivas y relevantes, independientemente del contexto. Al integrar la resiliencia en el transporte, una parte fundamental de nuestra vida cotidiana, podemos crear sistemas que sean robustos, adaptables y capaces de resistir los diversos desafíos que plantea el cambio climático.